lunes, agosto 25, 2008

Amenaza



Sólo una vez en mi vida amenacé de muerte a alguien.

Ocurrió hace como diez años. Es más, ya lo había olvidado, pero diversas circunstancias recientes me lo han traído de nuevo a la memoria. Es más, ya ni siquiera recordaba que incluí la anécdota, casi palabra por palabra, en un cuento llamado La botella azul, que trata de un joven que comete estupidez tras estupidez y que la única acción noble de su vida es la que lo hunde.

Me encontraba junto con varios amigos en el área de comida de un centro comercial en Zapopan. Solíamos reunirnos a jugar rol ahí antes; yo tenía mucho tiempo sin hacerlo pero me gustaba ver y escuchar a mis compañeros. Entonces, me di cuenta de que había ahí una gatita amarilla (no la de la foto, pero una muy parecida, igual de flaca y con la misma cara de tristeza) . La gatita estaba agazapada en un rincón de la plaza, y junto a ella, en torno a una mesa, había un grupo de muchachos que no conocía. Uno de ellos la estaba asustando, si bien nada más con gritos y aspavientos; no se movió ni un centímetro hacia ella.

Fui corriendo y levanté a la gatita. El animalito era tan dócil que ni siquiera se resistió. Estaba más espantada que otra cosa, y se le podían sentir los huesos bajo la piel.

El tipo que la había estado asustando se levantó entonces y dijo que iba a matar a la gatita; probablemente en broma (¡vaya sentido del humor, entonces!). Su novia (creo que eso era) soltó una risita de incomodidad.

Me di la vuelta.

- Vamos, hazlo - le dije -, y así yo podría matarte.

No sé de dónde me salieron las palabras, y si había alguna clase de ira en mi voz, era de las más heladas.

Juraría que el fulano dio un paso atrás. Debió haber percibido que yo no bromeaba.

- Yo... yo podría matarte a ti - respondió. Se elevó desde su cuando menos metro setenta y observó, al parecer confundido, mi nada peligroso metro y medio. Le di la espalda y, con la gatita en los brazos, me fui derecho a mi casa. A mitad del camino, me di cuenta de que estaba temblando; posiblemente lo estuve haciendo desde un principio. Ya para llegar, los ojos comenzaron a desbordárseme, yo creo que de pura tensión.

Un amigo le dedicó palabras muy bondadosas a mi “hazaña”; fue realmente amable. Pero uno de mis conocidos, al enterarse, me recomendó que dejara de recoger gatos y me consiguiera una vida.

Total, todo se quedó en la escritura de aquel cuento. La gatita, gracias a Dios, no estaba enferma, sino desnutrida nada más, y con el tiempo le conseguí una buena casa. Jamás volví a ver al muchacho a quien amenacé. En cuanto al conocido que me diera tan buen consejo personal, supe después que para la clase de vida que acabó consiguiéndose, le hubiera convenido más tener un gatito.

10 comentarios:

Hector Fragoso dijo...

Bendito sea Dios que no eres violenta :), si con una gatita te pusiste así, ya me imagino cuando se trate de defender a los amigos o a las personas que uno quiere.

De verdad que hay gente que no tiene nada que hacer en la vida y lo único que se les ocurre es molestar a los demás, eso me da coraje. Espero que en otra vida esas personas, sean tratadas de igual manera

Farándula dijo...

Mejor que sea en esta vida, por si las moscas.

Hay personas que le tienen tirria a los animales porque no han debido de tener en su vida uno a menos de tres metros.

Yo tuve dos gatitas (una desapareció y la otra se la quedó mi ex). Todavía me hierve la sangre al recordar a la gente que se escandalizaba por mantenerlas en casa cuando tuve a mi hija.
-Regálalos, llévalos a la perrera, échalos a la calle. Eso trae enfermedades.- después ponían cara de asco, como si ellos no enfermaran nunca o no existieran los veterinarios.
Al final los gatos dormían la siesta con el bebé. Tres años y ni asma, ni toxoplasmosis, ni una sola alergia.
En otra ocasión tuve que dejar mi piso de alquiler porque el propietario no quería animales (mi novio tenía un Schnauzer enano). Le expliqué que era un perro pequeño, que ya estaba educado y todo eso..
-Cómo si son peces de colores. Animales no.

El mundo está lleno de cretinos

Aisling dijo...

Thor: No, en serio, violenta no soy. Pero claro que a la gente que quiero la defiendo con uñas y dientes; y en el caso de los animales me siento obligada, porque se me hacen lo más inocente del mundo y porque no pueden hablar. Por desgracia, me ha tocado ver muchos casos de crueldad hacia los animales, y aunque trato de intervenir, no siempre salen las cosas como quisiera.

Fara: Totalmente de acuerdo; mejor en esta vida. Estoy convencida de que las personas que maltratan a un animal son perfectamente capaces de dañar a un ser humano. Y lamento decir que me ha tocado conocer personas como ésas horribles que describes, que hablan de una animalito como si se tratara de un objeto desechable. Qué bueno que decidiste conservar a tus gatitas a toda costa. Hay quien arroja a sus mascotas a la calle o las abandona porque de pronto le cambia el humor o porque instaló una alfombra más clara en su casa. En mi ciudad, por desgracia, hay una vía de alta velocidad que es un punto favorito para que la gente eche a sus perritos.

Al rayo. A todos los que abandonan a una mascota deberían a su vez echarlos a la calle cuando estuvieran viejos y enfermos. Espero que les suceda. Es únicamente a la crueldad con los animales a lo que me gustaría responder con la misma moneda.

Kitsune dijo...

Me vino a la mente mi propia imagen dfendiendo a un gatito al que, lamentablemente, no pude recoger como tú hiciste con la otra nena.
Lo único que espero es que Monkey se encuentre bien y haya crecido sano y entero
=(

Resulta que un sujeto de lo más intoxicado que solía tomar clases en mi facultad llegó un día "de visita" cargando un gatito hermoso como de 2 meses, se detuvo conmigo y una amiga para preguntarnos por una compañera a quien estaba buscando cuando me di cuenta de que el minimo estaba tan bien portado porque el tipo éste acercaba su papel con thiner a la naricita del gato. Claro que le dije mil cosas! El gatito no decidió echar a perder su vida de la misma manera que él... "le gusta" fue su respuesta, "además él come mejor que yo y le voy a poner un piercing esta semana"...
O_O
Le dije hasta de lo que se iba a morir, si quiere puede perforarse todo su horrible cuerpo, pero no el de un animalito que nunca pidió una cosa así. El sujeto terminó yéndose para buscar a sus amigos sin decir nada... espero que algo haya comprendido o que al menos el gatito haya podido escaparse de vivir con una persona así.

=/

Aisling dijo...

Kit: No puedo recordar quién es el autor de una cita que dice que hay gatos a los que el destino deposita en las peores manos, pero que esos animalitos no dejan de ser la cosa más increíble del mundo. Yo también espero que ese gatito que viste esté bien... que a su espantoso dueño se le haya prendido lo que le queda de neuronas o que alguien se lo haya quitado. Ay, si pudiera recoger a todos los gatitos en desgracia que hay en el mundo...

Petrus Angelorum dijo...

Pues a mí me consta que Ash es violenta... pero no llega a las manos, ni falta que le hace... a veces con algunas palabras uno podría exclamar: "¡Tengo miedo apa!"

Tal vez eso sea lo que me falte, conseguirme un gatito... veremos, veremos, veremos... por lo mientras no, que no tengo ni los recursos ni el tiempo para mantenerlo... no quiero ser esa clase de dueño de mascosta desobligado que pone de veras en manos de Dios a su animalito.

Yo sí tuve que regalar mi parvada de periquitos australianos, ¡bua!, el oculista me prohibio tener mascota... cuando casi diez años desupués me curé de la enfermedad que tenía (tracoma) mi primer pensamiento fue: "Conorte, ¡ya podemos tener mascota!". Tarde ya es...

Aisling dijo...

Je, je, je... cierto... mis palabras son dardos mortales y tengo una puntería de aquellas.

Pero vamos, Pere, en realidad es a Dios quien pone animalitos en las manos de uno, a veces. Sería bueno que uno procurara que esas manos fueran dignas y capaces.

Por enésima vez, deja a Conorte en paz. Mejor dicho, por la paz. Esto comienza a hacerse un poco repetitivo...

Kitsune dijo...

Acabo de encontrarme esta frase:
“If man is not to stifle his human feelings, he must practice kindness towards animals, for he who is cruel to animals becomes hard also in his dealings with men. We can judge the heart of a man by his treatment of animals”.
Immanuel Kant

:)

Anónimo dijo...

xD muy antiguo esa entrada, ya sé. pero acabo de llegar aqui gracias google [buscando un dato de Suikoden] y leo esto D:!
de verdad que me conmovió~ yo soy igual cuando de animales se trata, me da tanta rabia la gente maldita que cree que los animales están para que hagamos lo que queramos con ellos >_>! a veces esas actitudes hacen que uno deje de pensar con lógica y se les enfrete no más >:O total, la vida de la gatita era 1000 veces más valiosa que la de ese tipo xD [seh, me dejé llevar, pero no creo que esté mu lejana a la realidad xD]
Bueno, te felicito por tu buena acción y ojalá nunca cambies esa manera de reaccionar ante las injusticias, el mundo necesita gente así :O!!!!
que estes bien xD!
adeu~~♫

Aisling dijo...

Hola, Anónimo... si eres un amante de Suikoden y también de los gatitos eres más que bienvenido aquí. Je, je, je... todavía siento un poquito de miedo al recordar aquella ocasión y la cara del tipo, pero creo que no me arrepiento. Lo volvería a hacer. Aunque ahora, ya con la edad que me cargo, quién sabe qué efecto tendría.

Gracias por tus palabras. :>

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