jueves, abril 30, 2009

Aislamiento

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Una servidora en atuendo ninja... ¿qué tal el color azul brillante de ese pedazo de trapo? Las ojeras son naturales, cortesía de varias noches sin sueño.


"Don't it always seem to go
that you don't know what you've got til it's gone?"

De Big Yellow Taxi, canción de Joni Mitchell

Como medida para prevenir el contagio y la propagación de la influenza porcina, el gobierno mexicano ha solicitado que, entre otras dependencias, las escuelas y universidades suspendan labores. Eso, por supuesto, nos incluye en las labores diarias al Capitán y a mí. No que estemos muy felices con la idea, porque menos trabajo implica también que entre menos dinero a la casa... y el mes de mayo es uno de los difíciles del año. Gracias a Dios queda el trabajo extra... sólo que el mío no parece terminar y los clientes de él remolonean un poco cuando de pagar se trata.

No son vacaciones de más. Lo que las autoridades han solicitado de la población es que nos quedemos en casa lo más posible. Y así ha sido en estos días... no hemos salido más que para hacer compras y pagos.

Sin parecer desierta ni mucho menos, la ciudad tiene un aire a epidemia que, no puedo evitarlo, cómo me recuerda a The Stand de Stephen King. El calor está infernal, el aire transporta más polvo. La gente sale a la calle con tapabocas de paño, aunque, varios doctores lo han repetido por televisión, el artefacto no sirve tanto para cuidarse del virus como para evitar contagiar a otros. Uno de los médicos locales, de muy buen humor, afirmó incluso que más que una protección, el tapabocas funciona como una expresión de solidaridad, una muestra de que la gente está consciente de que hay riesgos. Y un desplante de moda, diría yo; ayer vi a una señora que llevaba uno hecho con una preciosa tela bordada. Mientras no nos lo tomemos como panacea, todo bien.

En casa, las mascotas se muestran sorprendidas ante esta insólita oportunidad que tenemos de pasar todo el día juntos, y no quieren separarse de nosotros. Duermo temprano, me levanto temprano, las labores domésticas no cesan; G. sigue un poco enfermo e igual de reacio a tomar las medicinas como debe de ser. Por el mal humor y por las labores pendientes, no he estado haciendo la gran cosa de lo que me gusta; hasta la lectura anual de El Señor de los Anillos va atrasada. Hacia media tarde la casa se llena de una somnolencia general y hastiante. Justo antes de que la alerta epidemiológica subiera de nivel 3 a nivel 4 (estamos en nivel 5 en este momento), se descompuso nuestro reproductor de DVX. Increíble cómo la ausencia de un simple aparatito pueda causar tanta desdicha.

Cuando vamos a la tienda por comida (gracias a Dios todavía nadie se ha lanzado a hacer compras de pánico) me aprieta el corazón el pensar que, apenas hace algunas semanas, me encontraba en Zacatecas, revisando libros de usado entre un mar de gente; apiñándome en el concierto de Radaid, y ya de regreso de vacaciones, abriéndome paso a codazos entre el atestado transporte a mi trabajo, o haciendo una fila inmensa para las cajas del banco, o probándome ropa en mi tienda hindú favorita. Apenas la semana pasada estuve en los talleres de Expojoya, menos concurridos que en otras ocasiones pero aún así una buena oportunidad de cercanía, y donde mi mayor mortificación tenía que ver con un tejido en gamuza que no lograba hacer bien. Supongo que no perderme entre mil personas lo que echo de menos, sino la libertad de poder hacerlo o no. Mis penas cotidianas, que tenían que ver con trabajo y presiones, parecen a la distancia casi agradables.

Estamos esperando un tiempo a que lo que tenga que incubarse termine de hacerlo y aparezcan y se traten los casos menos obvios de la enfermedad; el aislamiento tiene su función y su razón de ser. Sirve también, se supone, para medir qué tanto hemos echado mano de asuntos externos para rellenar nuestra vida, y qué tanto sobreviviríamos sin ellos, en nuestra propia compañía y procurando ahorrar en recursos. Todo lo cual, déjenme que les diga, no ha estado tan difícil hasta ahorita.

Pero pasarlo sin reproductor de DVX...

12 comentarios:

Coconut dijo...

La OMSS acaba de aprobar que se le nombre "Influenza humana" ya que no tiene nada que ver con la ingestión de la carne de cerdo como con la influenza aviar (además de las terribles repercuciones que ha tenido este nombre en la venta de este ganado).

Ni modo, a darle átomos!

Kitsune dijo...

Pues yo, desempleada y en proceso de tesis, extraño poco el hecho de salir tan seguido. Lo que sí es incómodo es hacerlo con el cubrebocas y el calor.

Al menos tus gatitos están felices de tenerte cerca y el Capitán se recupera. Ojalá todo siga bien.

Btw, te sienta muy bien el color del cubrebocas, te resaltan mucho los ojos
:)

Andrés Tonini dijo...

Hola Laura.

Recuerda que el aseo de manos es mucho más importante que el uso de un cubrebocas solidario. Como ya está escaseando el gel con alchol que se recomienda usar para complementar el lavado de manos (o sustituirlo cuando estás en la calle, por ejemplo), la Revista del Consumidor ha publicado una receta para hacerlo en casa.

Tranquila, que aunque serio, todavía no es el AporkalypseSaludos.

Arc dijo...

Se que no son vacaciones, pero cuando la vida te da limones, haz limonada. ^_^

Al rato vas a terminar añorando esos días que no tenías pendientes del trabajo, y descansabas en casa.

Vive en el presente Ais! es una de las claves para la felicidad.

Adeu, adeu!

S dijo...

No bueno, yo estoy apunto de la locura. Me siento como perro encerrado. Pero mañana viernes me dare una escapada, ire a bellas artes.

Así que a ver como me va jejejeje n_n

Nona dijo...

Qué guapa, Ais! :) incluso con traje ninja jaja me has hecho pensar en Taki del soul calibur jajajaja

Ánimos y que os sea leve chicos.. por aquí parece que no tardaremos en llegar a tal situación ^^U

Master Pei dijo...

Por eso Suldyn y yo te insistimos tanto en que te compres un 360, Aisling: tendrías una consola con juegos maravilloso Y un reproductor de DVDs. ¿Ves? El 360 te reclama ^^

Won-Tolla dijo...

Comprendo tu dolor... pospusieron el estreno de Star Trek y pa'cabar de fregarla feneció el Xbox

Chendo dijo...

Pues ahora si que ya tuve el gran honor de conocer tus ojos, y con el debido respeto te puedo decir que son lindos y expresivos, así que otra felicitación más tanto para ti como para el estimado capitán y también los mejores deseos para que mejore. Respecto a estar en casa pues que rico hay que aprovechar a lo largo de la semana estuve con mis hijos y ahora me toca con mi novia y a todos los disfruto al máximo, ;)

Lucifire dijo...

First things first !!!! Creo que te ves muuuuuuuuuy bonita con ese atuendo ninja !!! En serio !!! El cubrebocas combina con tus ojos !!!! Eres linda maestra !!!! Y bueno, cochina fiebre de los tocinos !!! Pero debemos estar agradecidos que ahora podemos caminar felizmente por todo el país con una cierta cantidad de marihuana en el bolsillo ¬_¬ .... He salido poco de mi casa, estrictamente casa-oficina-casa; y ya me harté !!! extraño caminar por el centro para tomar el camión a casa !! y de paso comprarme alguna chuchería o tiliche :D Esperemos que ya para el próximo regreso a clases ya esté todo el asunto más calmado y que podamos regresar poco a poco a nuestras labores habituales.

Pig flew !!! jajajajajaja

Petrus Angelorum dijo...

Pues Petrus quería dejar de ser emo por un rato (sólo lo es en la Ciudad de México, Querétaro y Cuernvaca) pero... todo está cerrado en el país. Así que verá que puede escribir y hacer en estos cinco días obligados de descanso, sino león enjaulado (sin cafeína).

Petrus Angelorum dijo...

Según Magú es la venganza de los cerdos que terminan sus días como carnitas.

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La casa de Aisling by Laura Michel is licensed under a Creative Commons Atribución-No Comercial-Sin Derivadas 2.5 México License.