sábado, febrero 09, 2008

Tenemos SciFi Channel, yatta!!!!



Va a parecer propaganda barata, pero ya qué.

Razones por las que hace unos dos años y pico botamos nuestro viejo sistema de televisión de paga:

- Se estaba poniendo chafa y caro.
- Nos quitaron el Universal.
- Se ATREVIERON a quitarnos el Discovery.
- A los que lo pagaban en bancos y tienditas les daban más beneficios que a los que prepagábamos con tarjeta.
- Nos quedábamos semanas sin el servicio y aún así lo cobraban.
- El canal de oldies era lo único que lamentaríamos perder.

Razones por las que nos cambiamos a SKY:

- El canal Animax.
- Mi adorado Universal.
- El Animal Planet.
- Dos boletos para Cirque du Soleil en casi primera fila, gratis.

Pero ahora nos despertamos con la sorpresa... nuestros ruegos habían sido escuchados. Después de tanto tiempo de pedir, suplicar, exigir y etcétera el SciFi Channel Latino, y recibir respuestas como “Pues no, pero tenemos el canal RBD; ¿no les interesa?”, al fin tenemos lo que queríamos.

¿El servicio de SKY ha desquitado lo que vale? Ajá, ahí la lleva. ¿Atraerá a más personas? Al menos sé de una que ya va a pedir su suscripción.

Recuerdo, por allá a finales de los ochenta, cuando las televisoras estadounidenses discutían la idea de un canal dedicado absolutamente a la ciencia ficción. Las pláticas las seguía en la revista Starlog (aunque lo que más recuerdo es una caricatura de un marcianito que llevaba un letrero que decía “yo quiero mi SciFi Channel”). La pura idea me hacía agua la boca.

En la casa teníamos antena parabólica, y así fue que un día de verano (creo), apareció una nueva señal. No había nada en ella, salvo oscuridad y colores psicodélicos, como fondo de una voz ronca de hombre que repetía, una y otra vez y a intervalos de cinco minutos, el cuento “Imagina” de Fredric Brown.

No sé si ese promo tendría efecto hipnótico o qué onda, pero la verdad es que solía pasarme casi MEDIA HORA contemplando la televisión prácticamente vacía, y escuchando el cuento. “Imagina... imagina... ¡imagina...!”.

Cuando el canal “de en serio” llegó por fin, no decepcionó, aunque sus inicios fueron modestos. ¿Qué fue lo que inauguró la transmisión? Un maratón de Star Wars, con Carrie Fisher de anfitriona. Todavía conservo la grabación de aquello.

Después, llegarían las series viejitas que me encantan (Viaje a las Estrellas, La Dimensión Desconocida, Doctor Who), montones de películas de clase B y algunas series animadas que merecían espacio en la barra de la mañana (casi madrugada, para nuestro horario del centro de México). Y un programa sobre ciencia y ficción (sips, por separado) que conducía la linda Nichelle Nichols al principio, y que por ahí le hacía espacio a los personalísimos berrinches de Harlan Elison.

Para cuando el SciFi comenzó con sus producciones independientes (algunas bastante malitas, la verdad), ya hacía mucho que no teníamos la parabólica, así que nos tocó verlas en el Hallmark. Hacia finales del año pasado, el Universal comenzó a pasar anuncios absolutamente geniales de la versión latina del canal... Llegó la fecha de estreno, y nada... Y comenzaron entonces las llamadas a SKY, las peticiones por correo electrónico, el sabotaje al canal RBD, todo aquello.

Bueno, pues el día de hoy con otra serie favorita, Sliders, estamos ahora mismo estrenando el SciFi.

Gracias de nuevo, SKY.

Para terminar con este rollo, les dejo aquí, en su totalidad, el cuento de Fredric Brown que les mencionaba, lo primero que vi del SciFi original (desconozco al traductor, así que de antemano le pido disculpas).



Imagínate

Imagínate espectros, dioses y demonios.

Imagínate infiernos y cielos, ciudades flotando en el cielo y ciudades hundidas en el mar.

Unicornios y centauros. Brujas, hechiceros, genios y fantasmas.

Ángeles y arpías. Hechizos y sortilegios. Elementales, espíritus familiares, demonios.

Es fácil imaginarse todas esas cosas: la humanidad se las ha imaginado durante miles de años.

Imagínate naves espaciales y el futuro.

Es fácil imaginárselo; el futuro se aproxima realmente y habrá naves espaciales en él.

Así pues, ¿existe algo que sea difícil de imaginar?

Claro que sí.

Imagínate un trozo de materia y a ti mismo dentro de ella, consciente, pensando, y por lo tanto sabiendo que existes, capaz de mover ese trozo de materia en cuyo interior te hallas, de hacerla dormir o despertarse, amar o subir una colina.

Imagínate un universo –infinito o no, como tú desees representártelo-, con mil millones, miles, miles de millones de soles en él.

Imagínate un grumo de barro girando locamente en torno a uno de esos soles.

Imagínate a ti mismo, en pie sobre ese grumo de barro, girando por el tiempo y el espacio hacia un destino desconocido.

¡Imagínate!

Fredric Brown

4 comentarios:

Christian Domínguez Pérez dijo...

T_T Pues en mi flamante sistema de T.V. de paga nos acaban de poner un nuevo canal de deportes. . . bien chafa.

¡Quiero Animax y Sci-Fi!

Si recuerdo bien, en Sliders salía John Rhys-Davies ¿no?

Etxeberri van Eyck dijo...

Fredric Brown... Me suena... Si!! No es el mismo que escribió "The Screaming Mimi"?? =P

A ese libro le tengo un recuerdo muy especial. Me lo "prestó" mi tío q.e.p.d (que cómo tenia libros, pero nunca lo vi leyendo) pero lamentablemente yo también lo presté y nunca regresó. Lo conseguí en inglés hace poco, aunque no me sabe a lo mismo =S

Saludines Laura

Kitsune dijo...

Me encantó el cuento, tendré que buscar más cosillas de Frederic Brown
:)

Y disfruta que por fin tienes tu sci-fi channel
:)

En serio hay un canal de rbd?!!!!?
o_o

Won-Tolla dijo...

¡Quiero Galactica!

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